La casa helada trata de un anciano recordando a su difunta esposa, el anciano recuerda a su esposa en soledad, donde los días pasan en lluvia y frío, a falta de calor, el calor que le entregaba su esposa.
Un chico tímido, pero tan tímido que no puede ni siquera pedir sal a sus viejos mientras almuerzan en la mesa, tiene una rutina solitaria día a día encerrado en su pieza, jugando video juegos, leyendo cómics, cantar, bailar y masturbarse. En un día el chico mientras iba a empezar con su diversión, llega misteriosamente su amigo imaginario, que en un principio es un estorbo, pero luego es un compañero de vida.
Karni y Saul realizan Flytopia en el año 2012. Jonny, el personaje principal, que vive en el campo con su estupenda mujer es totalmente sofocado por los insectos infestados en su casa. Jonny trata de ignorar y seguir en su casa ejerciendo presencia para enfrentar a los bichos, su sexy esposa sale de viaje dejando a Jonny solo en la casa con los insectos. Jonny queda solo con los insectos, pero ya no matando bichos o ignorarlos, sino a comunicarse, relacionarse, tocarse, con el tiempo la relación
En medio de la cinematografía hermosa de Islandia rural, vemos un viejo granjero metódicamente ir sobre sus planes. A través del dolor físico y la determinación de un artesano, él es muy atento y serio. Durante la mayor parte de la película, su interacción monosilábica con los amigos y la familia está a punto de cerrar hasta asentarse en una comunidad de retiro, ciertamente no se ve feliz mirando su colorido folleto.
Tierra y Pan "habla de una situación tercermundista, pero se comunica con otro mundo", explicó el director. "Busqué un lenguaje original, propositivo. Quizá fue eso lo que le llegó, se trataba de una película sin diálogo y eso ayuda a que fuera más universal". Si uno se limitara a enumerar sus elementos –un perro famélico amarrado a un palo, una choza en medio de la nada y la familia en desgracia que la habita–, podría crear la impresión de que el director explotó la miseria de su país.
Cortometraje de Cristóbal Sobera y Néstor Pérez trata sobre una organización autoritaria llamado Brazaletes, en la cual personas pertenecientes a la organización tienen un brazalete en sus brazos, vigilando a la ciudadanía que este todo en orden y que nadie haga cosas “indebidas”.
Gabriel Eduardo Ortiz Huerta
Estudiante de Cine U.Mayor 2015